CÁNCER DE CERVIX
COMO AFECTA A NUESTRAS MUJERES
Escrito por: Jehny Guzmán
Fecha: Marzo 2018
El cáncer de cérvix o cuello uterino es una enfermedad prevenible y 100% curable si se detecta tempranamente. Según nuestros registros República Dominicana tiene un promedio de 1 500 casos nuevos de cáncer de cuello uterino cada año y 600 muertes a causa de esta enfermedad, pero estudios de organismos internacionales, reportan que cada año en República Dominicana se diagnostican 13 000 nuevos casos de cáncer. Prácticamente todos los casos (99 %) están relacionados con la infección genital por el virus del papiloma humano (VPH), que es la infección viral más común del tracto reproductivo.
A nivel mundial se reportan unos 450.000 nuevos casos y unas 231,000 muertes anuales por Cáncer de Cérvix, de estas muertes el 80% ocurren en los países en vías de desarrollo. La reducción de muerte por cáncer de cérvix en los últimos 50 años en EEUU. ha sido atribuido a la gran implementación del Papanicolaou, como prueba rastreo.
En los países subdesarrollados como el nuestro, donde no existen programas efectivos de rastreo cervical, el cáncer de cérvix, sigue siendo la primera causa de muerte en las mujeres después del cáncer de mama.
A nivel mundial el cáncer de cérvix, es el segundo cáncer más frecuente en las mujeres y la tercera causa de muerte por cáncer. Esta es una de las principales razones por la cual los ginecoobstetras, deben estar altamente capacitados en el manejo de la patologías del tracto genital inferior y principalmente de las neoplasias cervicales intra epiteliales, para poder enfrentar el gran reto que tenemos por delante, de disminuir la mortalidad por cáncer de cérvix, una patología 100% prevenible.
El cáncer cervical es producido por las cepas de alto riesgo del virus del papiloma Humano, más de 30 cepas afectan los genitales pero el 16 y 18 son responsables del 70% de los casos y es una enfermedad progresiva que evoluciona de la siguiente manera: infección por HPV de alto riesgo, displasia leve, displasia moderada, displasia severa, carcinoma insitu, carcinoma micro invasor y finalmente carcinoma invasivo. Normalmente para una lesión llegar de displasia leve a cáncer invasivo deben pasar 5, 10 y hasta 15 años dependiendo del estado inmunológico de la paciente.
Se observa con mayor frecuencia entre los 35 a 45 años de edad, con menos frecuencia por debajo de los 20 años y a partir de los 60 el riesgo de presentar cáncer de cérvix va en descenso.
El cáncer de cérvix es asintomático, no presenta ningún tipo de síntoma excepto cuando está muy avanzado que invade algunos órganos como vejiga, recto, uréteres, vagina, presentando sangrados transvaginales, problemas para evacuar, dolor lumbar bajo entre otros.
Actualmente existen vacunas para prevenir el cáncer de cérvix que contienen las principales cepas productoras de esta enfermedad. Se administran a partir de los 9 años tanto para hembras como para varones.
La mejor manera de mantenernos alejadas del cáncer de cérvix es realizando un Papanicolaou por lo menos 1 vez al año.